Nota del editor: este artículo se publicó por primera vez el 19 de enero por Ireland Blouin y fue traducido al español por Jasmine I Wright.

El Seis de enero, el Senador Charles Perry introdujo una factura SJR 26  para enmendar el fondo universitario permanente. 

La factura propone una enmienda constitucional a permitir todos las instituciones en el sistema de la Universidad de Texas A&M y el sistema de UT a recibir los ingresos y otros beneficios del fondo universitario permanente en vez de las catorce universidades seleccionadas en el pasado. 

La constitución de Tejas estableció el fondo universitario permanente en 1876, que declaró tierra en el oeste de Tejas para apoyar los sistemas de UT y la universidad de Texas A&M y asignar la distribución de los fundos entre las dos universidades. La junta de regentes pone completamente aprueba todos los usos de los fondos cuando son solicitados por los sistemas.

“Hasta cierto punto, el sistema de ingresos de UT está conectado con el precio del petróleo y gas,” dijo Ehud Ronn, profesor financiero. “Los primarios ingresos estaban generados por el fondo universitario permanente del arrendamiento del petróleo y gas en las tierras en el oeste de Tejas.”

La factura SJR 26 se enfoca en que todos las instituciones de UT y la Universidad de Texas A&M tienen acceso a sacar provecho del fondo universitario permanente. Hasta el sitio web de UT-Austin afirma que todas las trece instituciones de UT puedan acceder al fondo universitario permanente, esta nueva ley únicamente cambia el fondo en los sistemas universitarios de la Universidad de Texas A&M. Participantes en Twitter comentaron su decepción con la fractura por un falto de una cláusula que incluyen otras universidades en Tejas. 

“Solo 4% del fondo universitario permanente se gasta cada año y el financiamiento está dividido entre UT y la universidad de Texas A&M,” De fuente correo electrónico, Catherine Frazier, directora de relaciones medias en el sistema de UT comenta, “UT recibe dos terceras partes y la universidad de Texas A&M recibe la tercera parte.” Frazier continúa, “en términos de los dólares de los fondos universitarios permanentes se gastan, todo tiene la aprobación de la junta de regentes de la universidad de UT en las reuniones trimestrales.

Según el correo electrónico de Frazier, se usa el fondo universitario permanente por tres casos. El primero es el programa de LERR, que financia las bibliotecas, y la reparación y rehabilitación de los equipamientos. El segundo es el programa de STARs, que permite al universidad adquirir materiales de ciencia y tecnologías y retener una facultad elite. Finalmente, la junta de regentes puede elegir dónde financiar el resto de los ingresos.

En el año fiscal del 2023, casi 70 millones de dólares están allegados por los varios institutos académicos en el sistema de UT. 65 mil se gasta en libros bibliotecarios y materiales, 7,4 millones de dólares se gasta al material capital y 58,4 millones se gastan en los reparos de campus. No se va a financiar a través de la facultad que participa el programa de STARs.

“Básicamente,  el fondo crea el flujo de caja de UT y Texas A&M,” dijo Ronn. “Esencialmente, hay un dividendo anual que fundan las operaciones, y la gente puede usarlos para cosas buenas.”