Nota del editor: Este artículo fue originalmente publicado el 23 de marzo del 2024 por Isa Almeida y fue traducido al español por Sofia Estrada Ferrufino.
Los resultados sólidos por ambos lados de la duela le dieron la victoria al equipo femenino de baloncesto de Texas sobre la sembrada 16, Drexel Dragons, en la primera ronda del torneo NCAA.
Después de que Texas saltó con un inicio de 9-0, el equipo basado en Filadelfia dio señales de vida, cerrando la diferencia a 19-12 para el final del primer cuarto. De los 12 puntos, ocho vinieron de la escolta de tercer año, Amaris Baker. Baker, quien es la máxima anotadora para las Dragons en la temporada 23-24, se transfirió a los Dragons al principio de la temporada de Harcum College, una escuela de NCAA Division II.
“(Baker) nos estreso un poco”, dijo el entrenador en jefe de Texas, Vic Schaefer.
Desafortunadamente para las Dragons, ese momento no duró mucho tiempo. En el segundo cuarto, Texas anotó 21 puntos y mantuvo a Drexel a no más de ocho. Las Longhorns llevaban 20 puntos de ventaja a medio tiempo.
Al regresar de medio tiempo, la ventaja solo creció y Texas estaba a más de 30 puntos arriba para el tercer cuarto. Cuando Drexel movió su enfoque defensivo hacia la escolta, Shaylee Gonzales encontró espacio para triples. De sus 21 puntos totales en el juego, 15 vinieron triples. Gonzales fue la única jugadora de Texas que apuntó de tres.
“Solo me trae mucha felicidad de ver que Shaylee agarre autoestima así”, dijo la delantera de primer año, Madison Booker. “Cuando ella hace eso, y está en llamas, siempre le voy a dar el balón”.
Booker, conocida por sus juegos de alto puntaje, no pudo alcanzar las doble figuras en su primer juego de March Madness pero le hizo justicia a la descripción de Schaefer de ella como “generosa a la exageración” terminando el juego con 14 asistencias. Las catorce asistencias de Booker fueron lo más alto de todos los tiempos para una jugadora de Texas en el torneo NCAA.
“Habla volúmenes de la chica”, dijo Schaefer. “Quizás no fue su mejor noche tirando el balón, pero no ha tenido una noche como esta en toda la temporada. Y aun ella encuentra una manera de ayudarnos a ganar. Eso es lo que hace una All-American”.
La escolta de último año DeYona Gaston no tenía que estar jugando ante Drexel. El día antes del juego, Gaston no se sentía bien pero decidió a último minuto intentar jugar. Su decisión valió la pena, ya que Gaston fue la única jugadora de ambos equipos de anotar un doble-doble con 11 puntos y 10 rebotes.
“Ellas me enseñan mucho corazón”, dijo Booker. “Ellas quieren ganar, ellas quieren estar en la cancha con nosotras, ayudándonos. Solo es su manera de enseñar que están dedicadas al equipo”.
Schaefer y su equipo estuvieron presentes para el juego entre Alabama y Florida State, en Moody Center, siguiendo su victoria para conocer a su próximo oponente. Texas recibirá al octavo sembrado, Alabama, el domingo para una oportunidad de avanzar al Sweet 16.
“Están bien entrenadas”, dijo Schaefer. “Ellas tienen jugadoras muy buenas, tienen jugadoras All-Conference. Tomará mucho esfuerzo de nuestra parte y nadie te la va dar”.