Nota del editor: Este articulo se publicó por primera vez por Lauren Hightower el 2o de octubre del 2024 y fue traducido al español por Sofia Estrada Ferrufino.
Texas Athletics será multado $250k y unos estudiantes tendrán su Big Ticket revocado por el resto del año académico después que los fanáticos en la sección de estudiantes aventaron botellas de agua a la cancha durante la pérdida de 30-15 contra Georgia el sábado.
Junto con la multa y actualización de procedimientos de gestión, Texas Athletics es requerido por la Southeastern Conference de “usar todos los recursos disponibles, incluyendo seguridad, video del estadio y televisión, para identificar quienes tiraron objetos a la cancha o al equipo contrario”.
“El lanzamiento de escombros y resultado de interrupción de juego que tomó lugar la noche del sábado no puede ser parte de ningún evento de SEC”, dijo el notario de SEC Greg Sankey.
Si Texas no cumple los requerimientos, la SEC suspenderá los privilegios de venta de alcohol, de acuerdo a las SEC Bylaws and Commissioner’s Regulations.
La multa de SEC vino después de una declaración hecha por Board of Regents Chairman Kevin Eltife, Presidente de UT Jay Hartzell y Director Atlético Chris Del Conte en la mañana del domingo.
“Mientras apreciamos grandemente la pasión y lealtad de nuestra base de fans de The University of Texas at Austin, nosotros no toleramos comportamiento antideportivo que fue exhibido por unos individuales que aventaron objetos a la cancha durante el juego de anoche y sinceramente nos disculpamos con los jugadores de University of Georgia, entrenadores y fanáticos, al igual a Southeastern Conference y el equipo de arbitraje”, decía la declaración.
Estudiantes empezaron a tirar botellas después de una gran jugada por la espalda defensiva del último año Jahdae Barron. Barron despertó esperanza con los fanáticos de Texas cuando interceptó un paso y lo llevó a nueve yardas de la línea de gol durante el tercer cuarto, a cual punto Texas estaba a 23-8.
Sin embargo, esa esperanza fue malgastada cuando oficiales llamaron una interferencia de pase defensivo a Barron.
La multitud rugió cuando veían la repetición en la pantalla, abucheando a un nivel ensordecedor. Botellas de agua empezaron a caer de la sección de estudiantes hacia la cancha. Poniendo sus manos hacia arriba, Sarkisian caminó todo el camino a la línea de 10 yardas a decirle a los fanáticos que pararan.
“Yo literalmente solo estaba preguntando al oficial de lo que vio para anunciar un DPI”, el entrenador principal Steve Sarkisian dijo. “Y luego en ese momento, la basura llegó a la cancha”.
Los escombros solo retraso el juego por unos minutos debido a la reacción rápida de la gente en los banquillos, pero el comportamiento como quiera resultó en sanciones aplicadas por el SEC.
“Yo entiendo la frustración, todos estábamos frustrados en el momento”, dijo Sarkisian. “(pero) todos de nosotros Longhorn Nation, yo se que podemos ser mejor que eso”.
Mientras no tan extremo como el comportamiento de fanáticos de Tennessee en 2021, cuando 18 fanáticos fueron arrestados por tirar basura hacia el banquillo de Ole Miss’ y retrasaron el juego por 20 minutos, entrenador principal de Georgia Kirby Smart dijo que el hecho que los árbitros invirtieron la llamada puede alentar comportamiento similar en el futuro.
“Ahora hemos establecido un precedente de que si tiras muchas cosas a la cancha y pones en peligro a los atletas tienes una oportunidad para que la llamada sea invertida”, Smart dijo. “Y eso desafortunado porque, para mi, es peligroso. Eso no es lo que queremos, y eso no es crítica de los oficiales. Eso fue lo que pasó”.
El paro fuerte de SEC contra el comportamiento del comportamiento de los fanáticos y la ejecución de las regulaciones va a desanimar ese comportamiento de ocurrir en juegos en el futuro.
“Nosotros estamos dedicados a fomentar un medio ambiente para todos los participantes, equipos, oficiales y fanáticos, y nosotros tomaremos pasos para asegurar que este tipo de comportamiento no ocurra otra vez”, decía la declaración de Texas.