Este artículo se publicó por primera vez el 4 de Noviembre del 2024 por Laura Rivera y fue traducido al español por Sara Solano Aguirre.
Los robos reportados han incrementado en la biblioteca Perry-Castañeda el último mes, de acuerdo con datos del Departamento de Policía de UT obtenidos por el Texan.
Desde el 30 de octubre, ha habido 17 reportes de robos en la PCL este año, excluyendo scooters y bicicletas. Diez de esos reportes ocurrieron en octubre, mientras que solo se registraron tres incidentes en el mismo mes durante 2022 y 2023. El año pasado, hubo un total de seis casos reportados y 11 en 2022.
Ellis Eaton, una analista de inteligencia para UTPD, dijo en un correo electrónico que los artículos más comunes que se roban en la biblioteca son mochilas, computadoras y teléfonos celulares.
Travis Willmann, un oficial de comunicaciones de las Bibliotecas de UT, explicó que los trabajadores de la PCL reparten hojas de advertencia y hacen anuncios cuando aumenta la actividad criminal en el edificio, advirtiendo a los estudiantes que no dejen sus pertenencias sin supervisión.
“Es una forma de informar a los estudiantes en el edificio que han ocurrido incidentes recientes”, dijo Willmann. “Necesitan estar alertas sobre la manera en que cuidan sus artículos personales”.
Willmann mencionó que las hojas de advertencia se distribuyen de forma aleatoria durante el día cuando los estudiantes dejan sus pertenencias sin supervisión, aunque no se les penaliza al recibir una hoja de advertencia. Explicó que cuando los estudiantes hacen esto, ponen en riesgo sus pertenencias.
“Si estuvieras en un centro comercial y dejaras tu cartera en un banco para ir al baño, es muy probable que tu cartera no esté allí cuando regreses”, dijo Willmann. “Nos importa mucho la seguridad de nuestros usuarios, pero hay limitaciones en cuanto a lo que podemos hacer”.
Estudiante de segundo año de Nutrición, Sofía Flores, dijo que deja sus pertenencias en su área de estudio en la PCL cuando va al baño. Sin embargo, el aumento de robos la ha vuelto más cautelosa.
“Estaba en la PCL para un proyecto en grupo y estaba a punto de ir al baño”, dijo Flores. “De repente, hubo un anuncio. (Decía) que había habido dos robos ese día. Pensé, ‘Oh, entonces no voy a ir al baño. Mejor espero’”.
La estudiante de segundo año de Neurociencias, Giselle Ibarra, dijo que cuando estudia sola y necesita un descanso, deja sus pertenencias sin supervisión. Comentó que se siente cómoda haciendo esto.
“Como todos somos estudiantes universitarios en estos espacios… tengo mucha confianza en los demás”, dijo Ibarra. “Todos estamos en la misma situación, así que (creo que) no se llevarán mis cosas”.
Flores dijo que no se siente cómoda dejando sus pertenencias solas a menos que haya personas alrededor. Comentó que aconseja a los estudiantes ser más cuidadosos con sus pertenencias.
“Escondería todas mis cosas de valor en una bolsa para que no estén a la vista”, dijo Flores. “Luego (le) pediría a alguien, ‘¿Puedes cuidar mis cosas?’ mientras (voy) al baño o a donde (necesite) ir”.
Willmann dijo que si se roban las pertenencias de los estudiantes, deberían presentar un informe de robo con la UTPD. Aunque la PCL cuenta con un guardia de seguridad, mencionó que es responsabilidad de los estudiantes cuidar sus pertenencias.
“Contamos con esos controles de seguridad, que están pensados como una capa adicional de seguridad para quienes trabajan aquí en horarios irregulares, pero durante el día, está abierto al público en general”, dijo Willmann. “Tenemos que tratar este espacio como lo haríamos con cualquier otro espacio público”.