Nota del editor: este artículo se publicó por primera vez el 16 de Noviembre del 2024 por Katie Borchetta y fue traducido al español por Lola Moreno-Flores.
El equipo de fútbol americano No. 3 de Texas triunfó sobre Arkansas en una batalla de 20-10 en Fayetteville, en lo que solo puede describirse como un juego de revancha para los Longhorns. Sin embargo, la ofensiva de Texas una vez más enfrentó dificultades, mientras que la defensa brilló.
“Les estaba diciendo a los muchachos que estuvieron aquí hoy, que cuando salgamos del túnel, ‘2021, solo recuérdenlo’”, dijo el defensivo en su cuarto año, Jahdae Barron, haciendo referencia a la derrota de Texas contra Arkansas en 2021. “Recuerden lo que pasamos y cosas como esas, y no dejen que eso vuelva a suceder. Así que fue una buena victoria como visitantes”.
Texas lideró con 158 yardas totales frente a las 74 de Arkansas y una ventaja de 10-0 al medio tiempo; sin embargo, la ofensiva tuvo poco éxito convirtiendo puntos. El mariscal de campo junior Quinn Ewers parecía nervioso en el bolsillo, mostró poca capacidad para escapar y, debido a la intensa defensa de seguridad de Arkansas, no logró pases profundos. Sin embargo, Ewers, aunque admitió su frustración en algunos momentos del partido, todavía se siente orgulloso de la ofensiva.
“Vas a tener juegos como este”, dijo Ewers. “Al final del día, creo que hicimos un buen trabajo manteniéndonos serenos y compuestos”.
Ewers lanzó dos pases de touchdown, extendiendo su racha de lanzar un touchdown en 21 juegos consecutivos que ha jugado, la segunda racha más larga en la historia de Texas, detrás de Colt McCoy con 29.
Ambos touchdowns de Texas en el día provinieron de pases precisos de Ewers al receptor abierto junior Matthew Golden, quien estaba completamente desmarcado en el primer cuarto y nuevamente, pero fuertemente cubierto, en el cuarto cuarto. Después de que Arkansas lograra un touchdown y un gol de campo, acercando el marcador a 13-10, los Longhorns sabían que necesitaban anotar para asegurar la victoria. Entra Golden.
“Está jugando realmente bien, quiero decir, tiene manos muy fuertes”, dijo el entrenador en jefe Steve Sarkisian. “Creo que hay un gran nivel de confianza entre Quinn y Matt, y definitivamente es extremadamente efectivo en la zona roja cuando tienes que hacer esas atrapadas en espacios reducidos. Ahora, el primero fue bastante fácil, se desmarcó en ese, pero sin duda fue una gran atrapada en el cuarto cuarto para el touchdown”.
El dúo de corredores compuesto por el sophomore Quintrevion Wisner y el junior Jaydon Blue también fue clave para Texas, ayudando en el juego terrestre cuando el juego aéreo no era suficiente. Blue y Wisner registraron 83 y 59 yardas terrestres, respectivamente.
Sin embargo, las estrellas del partido no fueron los jugadores ofensivos, sino la defensa. El grupo, que Nick Saban, ex entrenador en jefe de Alabama y presentador de College GameDay, calificó como “la mejor defensa en la SEC”, sólo permitió una anotación a los Razorbacks.
La defensa se destacó en la primera mitad con cuatro capturas, una impresionante intercepción de Barron (su cuarta de la temporada) y solo permitió que Arkansas cruzara la mitad del campo hacia el territorio de Texas una vez. Aunque algunas jugadas de los Razorbacks lograron abrirse paso debido a la amenaza doble del mariscal de campo junior redshirt Taylen Green, la defensa demostró, una vez más, que son una de las mejores del país.
Además de su intercepción, Barron logró siete tacleadas, incluidas dos TFL y una captura. La defensa terminó el juego con 68 tacleadas totales.
“Sé que tuvo un gran partido”, dijo Sarkisian sobre Barron. “Es un tipo tan versátil porque es astuto en sus coberturas y en sus blitzes y cosas así, pero tiene un instinto para el fútbol. Su coeficiente intelectual futbolístico es muy alto, su conciencia es alta. Y creo que aporta algo especial para nuestro equipo defensivo”.
Esta es la décima victoria consecutiva de los Longhorns como visitantes desde la temporada 2022, lo que demuestra que son una amenaza en una conferencia donde se considera muy difícil ganar como visitante. Sin embargo, con inconsistencias aún presentes, Sarkisian y sus jugadores saben que deben seguir trabajando para alcanzar su objetivo final esta temporada.
“Creo que todos sabemos cuáles son nuestras metas para la temporada. Queremos estar en Atlanta, y en diciembre, competir por un campeonato de la SEC. Y queremos estar jugando el 20 de enero, pero no necesito insistir en el punto, no tengo que hablar de eso todo el tiempo con nuestros muchachos. Ellos lo saben”.