Nota del editor: este artículo se publicó por primera vez el 18 de septiembre por Isabella Capuchino y fue traducido al español por Jessica Nino.
En una pequeña habitación en San Antonio, Belle Ortiz yacía en su cama este verano pasado acompañada por masas de músicos de mariachi. Vibrantes trajes iluminaron su habitación, todos se reunieron junto a la cama para despedirse y rendir homenaje a la mujer que difundió su amada música y llevó su cultura a las escuelas de Texas.
Nacida y criada en San Antonio de padres mexicanos, Belle Ortiz comenzó a tomar clases de piano a los cuatro años y su talento floreció rápidamente. Después de graduarse de Lanier High y obtener un título en interpretación y educación musical de la Universidad de Our Lady of the Lake, se convirtió en educadora del mundo mariachi y sus interminables esfuerzos para integrar la música de mariachi en las escuelas de Texas le dieron el título de “la madrina del mariachi”.
El viudo de Belle, Juan B. Ortiz, un cofundador de Mariachi Campanas de América y instructor actual en San Antonio College, dijo que vivía como, “una entidad única, una visionaria extrema” destinada a ser un líder.
Juan dijo que Belle comenzó su trabajo en educación en San Antonio ISD y creó un grupo de baile musical llamado “Los Tejanitos” en Barkley Elementary. Debido al éxito del programa, el director de Lanier High reclutó a Belle para que se convirtiera en la maestra de coro de la escuela. Poco después, en 1970, ella organizó el primer programa de folklórico y mariachi en la escuela secundaria de los Estados Unidos.
“Muy pocas personas son bendecidas y afortunadas de ver que sus flores florezcan en frutos– vimos (el mariachi) ser aceptado por las escuelas, por la comunidad y no nos detuvimos allí”, dijo Juan. “Dijimos que necesitamos darle legitimidad a esta forma de arte”.
“El obstáculo más grande para Belle fue que le dijeron que no enseñara canciones en español”, dijo Juan. “Belle, aceptando el desafío, dijo: ‘Dejaré de enseñar en español si dejamos de enseñar los otros idiomas extranjeros”.
Juan San Miguel, nieto de Belle y estudiante de último año de estudios de jazz en UT y gobierno, dijo que Barkley Elementary le otorgó permiso para establecer un grupo de danza y música, pero asignó solo un armario de custodia para el espacio de ensayo. Sin embargo, la dedicación de Belle conectó a varias generaciones de chicanos con su herencia mexicana. Como resultado de su perseverancia como pionera educativa, más de 2,500 distritos escolares, colegios y universidades ahora ofrecen una educación en mariachi a los estudiantes.
San Miguel dijo que Belle cofundó Mariachi Campanas de América, un juego de palabras con el nombre de Belle. La estimada banda tocó en la Casa Blanca para el presidente Bush y en numerosas sinfonías en todo Estados Unidos. Expandió la huella del mariachi en 1979 al crear la primera Conferencia y Festival Internacional de Mariachi.
“Ella no tocaba (musicalmente), pero sabía cómo debería ser una actuación”, dijo Alejandro San Miguel, nieto de Belle y estudiante de tercer año de estudios de Jazz y gobierno en UT. “Ella siempre fue visionaria, no había tal cosa como soñar demasiado grande”.
Juan San Miguel dijo que se esfuerza por mantener vivo el mariachi a través de la educación.
“Lo más importante es siempre fomentar a la juventud porque es la juventud la que lleva la tradición”, dijo Juan San Miguel. “Continuar tocando y compartiendo la música, es el centro de lo que a Belle le apasionaba tanto”.