Nota del editor: este artículo se publicó por primera vez el 4 de octubre por Morgan Severson y fue traducido al español por Emma Rikalo.
El secretario de estado Antony Blinken discutió el estado de las relaciones extranjeras en el auditorio conmemorativo Hogg el miércoles.
Blinken fue presentado por el presidente de UT Jay Hartzell y entrevistado por Kay Bailey Hutchinson, ex embajadora de los EE. UU. ante la OTAN. El evento, alojado por el centro Clements de seguridad nacional de UT y el centro Robert Strauss de seguridad internacional y ley, es el primero celebrado en el centro Hogg desde que estuvo bajo construcción en noviembre del 2021.
“Esta es una ocasión importante para nuestra universidad, y se alinea con nuestro rol”, dijo Hartzell. “El ex presidente de UT Harry Ransom describe al campus de UT como un campo de ideas, y es verdaderamente cierto hoy mientras damos la bienvenida a nuestros estimados invitados”.
Blinken dijo que el presidente Joe Biden y el departamento estatal ven nuestro tiempo actual como un “punto de inflexión” en la historia, lo que significa que decisiones tomadas por los líderes de nuestro país ahorita moldearán el mundo por varias generaciones”.
“Tuvimos un punto de inflexión después de la segunda guerra mundial, otra después de que terminó la guerra fría, y creemos que estamos en un tal punto ahorita”, dijo Blinken. “Tienes a una competencia reemergente entre grandes poderes que se dedica principalmente a dar forma al futuro”.
El apoyo financiero sostenido de Ucrania por los EE. UU. y otros países durante su conflicto con Rusia es esencial para la resolución de la guerra, dijo Blinken. Blinken también dijo que el apoyo envía un mensaje a otros países de que no pueden comportarse de la misma manera que Rusia en su invasión de Ucrania.
“Una de las cosas que pensamos que cree el presidente Putin es que puede durar más que nosotros, más que los Ucranianos, que pueda sobrevivir al apoyo que está recibiendo Ucrania, y es muy importante que lo desengañamos de esa noción”, dijo Blinken. “Porque eso es en realidad el camino más rápido para resolver esto, poner fin a la agresión, (y) tener una paz justa y durable — nadie quiere eso más que el pueblo ucraniano”.
Además de apoyo inmediato a Ucrania en la guerra contra Rusia, Blinken dijo que los EE. UU., junto con 29 otros países en la OTAN, están trabajando con Ucrania para ayudar al país a ser económicamente autosuficiente y capaz de disuadir y defenderse de agresión en el futuro.
“Esto es una manera de ayudarles a montar esa fuerza, a hacerlo en una manera sostenida para nosotros, en términos de los recursos requeridos porque va a ser dividido entre 30 países, y a poner a Ucrania en una posición donde pueda valerse por sí mismo”, dijo Blinken.
Después de la visita de hoy a la universidad, Blinken se reunirá con funcionarios en México para discutir maneras de mitigar el ingreso histórico de migrantes en la frontera de los EE. UU.
Blinken dijo que alrededor del mundo, los países se enfrentan con el mayor desafío migratorio de la historia, ya que más de cien millones de personas se encuentran desplazados de sus hogares. En el hemisferio oeste, donde está localizado los EE. UU., Blinken estima que entre 20 a 25 millones de personas son migrantes.
“Es imperativo que hagamos todo lo posible tan eficazmente como podamos para asegurar que la migración sea humana, segura y ordenada…México es nuestro compañero más cercano en esto por obvias razones”, dijo Blinken.
Hace alrededor de un año en la Cumbre de las Américas, que reunió a países en el hemisferio oeste, Blinken dijo que prácticamente todos los países reconocieron una responsabilidad compartida al enfrentarse con la migración. Blinken dijo que esto significa que los países de origen, tránsito y destino de migrantes deben trabajar juntos para mejor controlar a la migración.
“Eso incluye todo desde aumentar su propio sistema de asilo para que la gente, si van a dejar a su hogar, pueda encontrar asilo en otros países, no sólo los EE. UU.”, dijo Blinken. “Significa en unos casos poder repatriar, llevar de regreso personas que han tratado de venir aquí sin la base legal para hacerlo. Significa asegurar que las personas sean tratadas en maneras seguras y humanas”.
Opioides sintéticos como el fentanilo son la causa número uno de muerte para estadounidenses de edades 18 a 49, dijo Blinken, colocando el problema en lo más alto de la agenda del país.
“Hemos sido el canario en la mina de carbón del fentanilo, pero ahora estamos viendo que se extiende a muchas otras partes del mundo”, dijo Blinken. “Este verano, armamos una coalición de alrededor de cien países determinados a trabajar juntos para abordar mejor el problema de los opioides sintéticos”.
Por último, Blinken discutió el desafío de combatir la desinformación en línea, asegurar que la tecnología se use por el bien, y promover el uso apropiado de la inteligencia artificial globalmente.
Blinken dijo que la Casa Blanca ha dedicado mucho tiempo a trabajar con compañías estadounidenses liderando el trabajo en IA para alcanzar compromisos sobre cómo utilizar la IA para el bien y cómo mitigar cualquiera de sus desventajas.
“Mi trabajo ahora en el departamento estatal es asumir esos compromisos, asumir esos entendimientos entre la Casa Blanca y esas compañías fundacionales e internacionalizarlas, socializarlas alrededor del mundo, conseguir que otros países se sumen y que se registren para crear una fundación de cómo se puede usar la IA y lo que no se debe hacer”, dijo Blinken. “Esto es solo el principio de ese esfuerzo… Más que nada, eso va a formar al futuro en el que vivamos”.