Nota del editor: este artículo se publicó por primera vez el 24 de septiembre del 2023 por Evan Vieth y fue traducido al español por Nicolas Siman.
El entrenador en jefe, Steve Sarkisian, enfatizó durante la semana previa al enfrentamiento ante Baylor que, en el Big 12, Texas estaba 0-0 y que los juegos de conferencia son todo lo que importa de ahora en adelante. Después de 60 minutos de agresividad y dominio puro en la línea defensiva, Texas marcó el primero de nueve enfrentamientos del Big 12 en en su gira “Embrace the Hate”, con una victoria de 38-6 ante los Baylor Bears.
La mayor diferencia en el ataque de los Longhorns, que no logró anotar más de 10 puntos en los primeros tres cuartos fue su éxito temprano en el partido. Texas anotó dos veces en sus primeras cuatro series ofensivas, siendo la primera vez de la temporada que anotan más de un touchdown en la primera mitad. Para cuando los silbatos señalizaron el fin del segundo cuarto, los Longhorns habían marcado cuatro touchdowns y lideraban el partido por 22 puntos.
“Hemos estado hablado mucho sobre cuánto terminábamos las últimas semanas”, dijo Sarkisian. “Queríamos empezar realmente bien”.
Una vez más, el mariscal de campo de segundo año (redshirt), Quinn Ewers, brilló para los Longhorns. De sus 293 yardas, 126 llegaron en la primera mitad, moviendo el balón por el campo con un ritmo rápido y completando el 75% de sus pases en los primeros dos cuartos. Ewers también sumó una anotación de 29 yardas por tierra en una tercera oportunidad y 10 en el segundo cuarto.
“No pensaba que iba a anotar nada”, dijo Ewers sobre su escapada. “JT (Sanders) consiguió un buen bloqueo, seguí corriendo a su lado y terminé anotando”.
El receptor de tercer año, Xavier Worthy, incluso participó en el juego aéreo, completando un pase de 35 yardas al ala cerrada de tercer año, Ja’tavion Sanders en una jugada de engaño que acomodó una anotación de 7 yardas por tierra en la siguiente jugada. Sanders terminó el partido con 110 yardas, liderando al equipo con cinco recepciones.
En la defensiva, la defensa contra la carrera se mantuvo fuerte durante todo el partido. Baylor promedió 1.9 yardas por acarreo para un total de 60 yardas, con la mayoría de las jugadas terminando con cuatro robustos linieros defensivos rodeando al corredor en la línea de scrimmage.
“La línea defensiva jugó un gran partido”, dijo el apoyador de último año, David Gbenda.
Texas mantuvo a Baylor con 0 touchdowns, y uno de sus goles de campo llegó tras una recepción de despeje errada por Worthy en el segundo cuarto. El receptor de último año, Jordan Whittington tambíen tuvo un error recibiendo una patada de despeje: un fumble recuperado por los Bears al final del tercer cuarto, pero los frontales de los Longhorns forzaron un cambio de posesión en cuarta oportunidad y gol en la yarda 8, para mantener el marcador 38-6.
“Cuando tienes una pérdida de balón, dejas caer un despeje y ellos tienen el balón en campo corto, y puedes dar un paso al frente y defender de esa manera…”, dijo Sarkisian. “Esa es una gran ventaja”.
El apoyador de último año, Jaylan Ford, brilló en la victoria, acumulando ocho tacleadas, una para pérdida y una intercepción en la zona de anotación en cuarta oportunidad de Baylor, evitando que los Bears anotaran. El liniero defensivo de segundo año, Byron Murphy II estuvo en todas partes del backfield de los Bears, consiguiendo tres tacleadas para pérdida y dos capturas.
“Otra vez rotamos a muchos jugadores en la defensiva esta noche”, dijo Sarkisian. “Ese crédito se lo merece el cuerpo técnico defensivo por tener a todos esos chicos listos”.
Sarkisian y los Longhorns regresarán al Darrell K Royal-Texas Memorial Stadium el próximo sábado para recibir a los Kansas Jayhawks, quienes llegan con una marca de 4-0. Los Longhorns se encuentran a un partido del Red River Rivalry Game contra Oklahoma en The Cotton Bowl, con grandes implicaciones del campeonato del Big 12 y los playoffs avecinándose en las próximas dos semanas.