Nota del editor: Este artículo fue publicado originalmente por Caris Gray el 25 de mayo del 2025 y traducido al español por Valeria Cruz Butrón el 27 de Septiembre del 2025
El Sistema de UT presentó sus nuevas reglas de viaje en marzo para cumplir con el proyecto de ley GA-4 del Gobernador Greg Abbott. La ley busca proteger las infraestructuras sensibles y críticas de Texas contra “adversarios extranjeros” en las universidades y agencias del estado.
Esto viene después del Código 51.956 de Educación de Texas del 2023, “La estructura de la política para la seguridad de la investigación”, que requiere que todas las juntas directivas de las instituciones de educación superior designen a una persona como oficial de seguridad de la investigación. Los oficiales, entre otras cosas, son responsables de hacer informes sobre la influencia extranjera en relación con la investigación universitaria.
Como resultado, la SB 1273, entró en efecto el primero de septiembre. Esta legislación agregó que los oficiales de seguridad de investigación de las universidades R1 formarán parte del recién creado Consejo de Seguridad de Investigacion de Educación Superior, la cual:
- Identificarán las mejores prácticas para que las universidad realicen investigaciones y al mismo tiempo mitiguen la “amenaza de interferencia y espionaje extranjeros”.
- Desarrollar un modelo de política de seguridad de las investigaciones.
- Enviar un reporte confidencial sobre el estado de la seguridad de la investigación universitaria cada año, comenzando en el 2026.
Desde el inicio de las restricciónes en 2023, la legislatura de Texas ha limitado rápidamente los viajes del personal universitario a cualquier nación enlistada como adversario extranjero para propósitos relacionados al trabajo. Los viajes a estos países, China, Corea del Norte, Irán, Cuba, Venezuela y Rusia, ahora están “generalmente” prohibidos por política con excepciones extremadamente limitadas.
Mientras que la intención para la infraestructura de seguridad, resulte en detrimento a la educación general. Esta ley prohíbe a casi todos los profesores y a los estudiantes-empleados a participar en investigaciones, conferencias, talleres, presentaciones, trabajo de campo, docencia y becas a las que planeaban asistir. Esto no solamente daña a la academia más allá de las fronteras internacionales, sino que también disminuye la calidad del trabajo internacional y limita las oportunidades educativas que son cruciales para muchos estudiantes y para las áreas de estudio de las facultades, investigación y aprendizaje general.
Si un empleado universitario quiere viajar a una de estas naciones, hay dos pequeñas excepciones: (1) Que sean financiadas por una subvención federal que expresamente provee por el viaje, o (2) que reciba la aprobación de un alto líder de UT. Esto incluye la aprobación del Comité de Supervisión Internacional (International Oversight Committee).
Sung-Sheng (Yvonne) Chang, directora del centro de estudios de Taiwán ha viajado a China casi todos los años, durante las últimas dos décadas y dijo que las regulaciones reducen su incentivo para regresar.
“Quieres animar y asegurar a los investigadores … que continuen yendo a China (y dirigir) investigaciones. Podemos todos naturalmente entender, si (nosotros) dejamos de hacerlo, (nosotros) nada más vamos a hacernos daño”, dijo Chang.
Arlene Rosen, catedrática de antropología y arqueología ambiental, previamente ha hecho investigaciones exhaustivas en China.
“Creo que en el fondo, si quieres fomentar el aprendizaje y colaboración escolar, no pones barreras”, dijo Rosen. “El hecho de que estemos antagónicamente creando barreras significa que estamos frenando cualquier progreso y el flujo de conocimiento e información”.
El ataque continuo contra la academia colaborativa ha perjudicado y continúa perjudicando la investigación más allá de las fronteras internacionales, disminuyendo la calidad del trabajo internacional y limitando oportunidades educativas que son cruciales para la investigación, disertaciones y educación para todo el personal y estudiantes de UT. Politizar la academia, ya sea en países “adversarios extranjeros” o no, no es una manera positiva de proteger los intereses educativos de Texas.
Gray es un estudiante de tercer año de antropología, gobierno y economía de Bayton, Texas.
