Nota del Editor: Algunas entrevistas para esta historia se realizaron en inglés y luego se tradujeron al español.

El viernes 10 de octubre del 2025, el comité noruego del Premio Nobel anunció que la líder de la oposición Venezolana, Maria Corina Machado, había sido honrada con el Premio Nobel de la Paz. Esto viene a raíz de su labor defendiendo la democracia y los derechos humanos en Venezuela según el comité. La decisión generó reacciones inmediatas tanto dentro del país como en el extranjero. 

Según el comité Nobel, la opositora fue premiada “por su incansable trabajo en la promoción de los derechos democráticos del pueblo venezolano y por su compromiso con una transición pacífica y justa hacia la democracia”. El premio vuelve a colocar la situación venezolana en el centro de debates geopolíticos y plantea preguntas sobre el futuro de la oposición, que ha sido repetidamente restringida por el régimen de Nicolás Maduro.

Maria Corina Machado es una ingeniera industrial Venezolana nacida en Caracas en 1967. Su carrera como activista comenzó a principios de los 2000 cuando creó Súmate, una organización dedicada a animar al voto y la supervisión electoral. En 2010, fue elegida como diputada a la Asamblea Nacional. A través de los últimos veinte años, se ha establecido como una de las voces más reconocidas en contra de los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, enfrentadose a inhabilitaciones políticas y persecución estatal. 

En 2024 Machado fue excluida de las elecciones presidenciales por una decisión judicial. El incidente generó críticas de organismos internacionales y denuncias de violación de los derechos políticos. A pesar de ello, Machado se mantuvo activa dentro del país, organizando un partido de oposición.

Kurt Weyland un profesor de historia en UT que estudia el populismo en países latinoamericanos dice que “de los 2010 en adelante más países han dejado la democracia que la han adoptado” especialmente en América. Muchos analistas consideran que este premio representa un mensaje hacia toda América Latina, donde los retrocesos democráticos y la concentración de poder han vuelto a intensificarse.

Cuando el premio se anunció hubo una serie de manifestaciones espontáneas en distintas zonas de Caracas. Aunque el gobierno no ha hecho ningún comentario oficial, cientos de miembros del partido Vente Venezuela, fundado por Machado en 2012 han usado las redes sociales para celebrar a su líder. 

Ariel Dulintzky, profesor de derecho internacional en UT afirma que el premio demuestra que “es una lucha que vale la pena lucharla”, refiriéndose a los esfuerzos por la democracia y continúa diciendo “si no lo hace Corina Machado, si no lo hacemos cada uno de nosotros quién lo va a hacer”. 

El Premio Nobel de la Paz 2025 para María Corina Machado trasciende los esfuerzos individuales. Reconoce la perseverancia de un país que, a pesar de la represión y la censura, sigue luchando por una salida democrática. 

En un país marcado por la crisis y la emigración, el galardón es una oportunidad de renovar la esperanza venezolana.